Estimados compañeros de trabajo,
Es con profunda tristeza que me dirijo a ustedes en este momento tan difícil. Quiero expresarles mis más sinceras condolencias por la pérdida de nuestro querido compañero Don Oscar Velásquez Díaz.
La noticia de su fallecimiento ha dejado un vacío en nuestros corazones y en nuestras oficinas. Don Oscar Velásquez Díaz era más que un colega, era un amigo cercano y un colaborador excepcional. Su dedicación, amabilidad y buen humor dejaron una marca imborrable en todos nosotros.
Recordaré siempre los momentos compartidos, las risas, y su pasión por su trabajo. Su partida deja un hueco difícil de llenar, pero su legado perdurará en nuestros recuerdos y en el trabajo que realizó con tanto esmero.
En estos momentos de duelo, les envío todo mi apoyo y solidaridad. Que podamos encontrar consuelo en los recuerdos compartidos y en el legado que Don Oscar nos deja.
Descansa en paz, querido amigo y compañero. Siempre estarás presente en nuestros corazones.
Con profundo pesar,
Iván Ibarra Jara.
